14 de noviembre de 2004
Las
enfermedades relacionadas con el tabaquismo matan cada día a más de
cien personas en España Los
médicos consideran "positivo" el anteproyecto de ley contra el
tabaco presentado por el Gobierno
Más de cien personas mueren cada día en España a
causa de enfermedades cardiovasculares y broncopulmonares
relacionadas con el tabaco, según declaró ayer el coordinador
nacional de la Red de Tratamientos Adictivos, Fernando Rodríguez.
Este experto participó en Barcelona en el IV Congreso Nacional sobre
Prevención y Tratamiento del Tabaquismo, en el que se han analizado
durante dos días las necesidades de informar, prevenir y tratar las
causas y consecuencias del tabaquismo en España.
Rodríguez explicó que el tabaco es "un arma destructiva" que
afecta a más de 1.000 millones de personas en el mundo y contra la
que las autoridades y la industria no quieren luchar. "Los Estados
se lucran y permiten esta actividad", denunció. Según este
especialista, la cardiopatía isquémica, las enfermedades
cerebrovasculares y cardiovasculares y la obstrucción crónica o
neumonía son las principales causas de la muerte prematura en
nuestro país. En su opinión, la gente todavía no conoce los
verdaderos riesgos del tabaco. "Las prohibiciones son importantes,
pero no son la única solución", resaltó.
La decisión de abandonar los cigarrillos es, según Rodríguez,
"difícil y costosa", puesto que a los individuos "les resulta más
fácil fumar y enfrentarse a enfermedades como consecuencia del
tabaco que dejarlo y sufrir procesos de ansiedad y trastornos que
les son desconocidos". El tratamiento de los fumadores empedernidos
requiere, según el coordinador, el desarrollo de psicopatologías
distintas para cada paciente que eviten que éste pueda tener
depresiones.
Tanto Fernando Rodríguez como el resto de congresistas
consideraron "positivo" el anteproyecto de ley contra el tabaco
presentado la víspera por el Gobierno y que era "deseado" desde hace
años. La normativa establece que, a partir de enero de 2006, no se
podrá vender tabaco a menores de 18 años ni fumar en los centros de
trabajo. Además, ha ampliado al máximo la lista de espacios donde
estarán proscritos los cigarrillos, que incluye bares, restaurantes,
hospitales, museos, colegios e instalaciones deportivas cubiertas.
"Cualquier medida que se tome para dificultar el acceso al
tabaco va a ser positiva, pero hay que hacer especial hincapié en la
prevención, sobre todo durante el desarrollo juvenil, en la
adolescencia, que es cuando hay más facilidades para llegar a crear
comportamientos adictivos", subrayó Fernando
Rodríguez.